La participación ciudadana es uno de los ejes vertebradores de la labor del movimiento vecinal. Así lo pusieron de manifiesto ayer las decenas de representantes que participaron en la asamblea sectorial convocada por la FRAVM para valorar el desarrollo del ‘Acuerdo de revitalización de los consejos territoriales’, firmados por la Federación vecinal y el Ayuntamiento de Madrid. Muchas de las más de 25 intervenciones llamaron la atención sobre lo que consideraron un funcionamiento insatisfactorio de los Consejos Territoriales, así como sobre la falta de desarrollo de otros aspectos fundamentales del reglamento de participación ciudadana, como el referido a la cogestión de los equipamientos municipales. Se abundó igualmente en la necesidad de descentralizar el poder municipal implantando un modelo basado en la transferencia de recursos y de la capacidad de decisión al escalafón más cercano a la ciudadanía: las juntas municipales.
Los representantes vecinales señalaron que el funcionamiento de los consejos dependen, en gran medida, de la voluntad política de los concejales y concejalas de distrito, que en no pocos casos han adoptado actitudes burocráticas y autoritarias. No obstante, hay cierta expectativa con respecto algunas de las mejoras incorporadas a los consejos, como la celebración, durante los próximos meses del pleno sobre el estado del distrito y del pleno de presupuestos.
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