La de ayer era la primera de las acciones simbólicas que las entidades de la FRAVM tienen previsto realizar con carácter mensual para pedir un refuerzo de la Atención Primaria y Hospitalaria ante la segunda oleada de la Covid-19, y sin duda resultó todo un éxito. Una colorida cadena de pancartas, carteles y banderolas enlazó las dos instituciones responsables de la sanidad en la Comunidad de Madrid y de la desastrosa gestión de la pandemia, y sirvió para trasladar reivindicaciones locales, la mayoría añejas. Este es el caso de la construcción del aprobado y siempre aplazado Centro de Salud de Butarque, en Villaverde, del segundo centro de salud para el Ensanche de Vallecas o de los demandadísimos tres nuevos centros de salud de Carabanchel Bajo, que la vecindad lleva más de 15 años esperando. O del centro de especialidades de Villa de Vallecas, distrito que a pesar de llegar ya a los 115.000 habitantes no tiene ninguno.
La asociación vecinalEl Cerro de Coslada portó una pancarta en la que pedía la reapertura del Servicio de Urgencias de Atención Primaria (SUAP) del ambulatorio Jaime Vera, que, al igual que la mayoría de SUAP de la región fue clausurado a finales del pasado mes de marzo como consecuencia de la apertura del hospital del IFEMA y desde entonces no ha vuelto a abrir sus puertas. La reapertura de los SUAP es una demanda prioritaria para las asociaciones vecinales de lugares como San Fernando de Henares, San Sebastián de los Reyes, Tres Cantos, Vallecas o Latina. La Asociación Vecinal de Puerta del Ángel, de este último distrito, además de pedir la reactivación del SUAP de la Avenida de Portugal, demandó la reapertura de los centros de salud de Cebreros y Pascual Rodríguez, así como un refuerzo de los centros de salud de Puerta del Ángel y Caramuel.
En realidad, todas las asociaciones vecinales que participaron ayer solicitaron más rastreadores y un refuerzo en la Atención Primaria de sus barrios, colapsada desde hace meses como resultado de la Covid-19 y de años de recortes. Algunas de ellas ilustraron con cifras en sus pancartas esta situación. “Centro de Salud San Fermín: nos faltan 5 médicos de 13”, podía leerse en la pancarta de la asociación vecinal de este barrio de Usera; “CS Carabanchel Alto: faltan 3 médicos y más atención telefónica”, aparecía escrito en la de la AV de este lugar. La Asociación Vecinal de La Poveda (Arganda del Rey), por su parte, denunció en su lienzo la falta de un médico y un pediatra, así como el recorte horario que ha sufrido el consultorio médico del barrio, después de permanecer medio año cerrado.
En el acto también participaron representantes de la Marea de Residencias y asambleas del 15M y asociaciones vecinales de diversos barrios de Usera, Puente de Vallecas, Ciudad Lineal, Retiro, Chamartín, Arganzuela, Leganés y el distrito Centro de la capital. La AV de Sol y Barrio de Las Letras, de este último lugar, reclamó en dos pancartas el traslado del viejo y deteriorado centro de salud de la calle Alameda al inmueble municipal que hasta hace un año albergaba el Centro Social La Ingobernable, una promesa electoral del actual alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida, que, de momento, parece haber olvidado. “Almeida cumple tu palabra”, aparecía escrito en una de ellas.
Durante el acto, no faltaron las peticiones de dimisión de la presidenta regional, Isabel Díaz Ayuso y los gritos contra la privatización de la sanidad.