Decenas de asociaciones vecinales se dieron cita ayer en la asamblea monográfica convocada por la FRAVM para tratar un tema que preocupa crecientemente a la población madrileña: las consecuencias de la privatización de la sanidad pública emprendida por el Gobierno de Esperanza Aguirre.
Tras exponer algunas de las consecuencias que padecen los usuarios de los centros de atención primaria, de los centros de especialidades y algunos de los hospitales recién inaugurados, las asociaciones vecinales acordaron iniciar una “ofensiva” informativa y movilizadora para dar cauce a las quejas de la ciudadanía sobre la prestación de la atención sanitaria en los barrios y denunciar la relación directa entre el abandono de la atención primaria y la cesión de la gestión de los nuevos hospitales a empresas privadas.
El calendario de movilizaciones comenzará el próximo martes 15 de abril a las 19h. con una concentración contra el cierre del hospital Puerta de Hierro que tendrá lugar en la calle Aduana, frente a la sede de la consejería de Sanidad.
Al día siguiente, el miércoles 16 de abril a las 11,30h. las asociaciones vecinales del área 4 convocan otra concentración ante el hospital Ramón y Cajal para pedir una reunión con el gerente del área al objeto de estudiar el Plan Funcional del centro, que da servicio a casi 550.000 vecinos, más del doble de lo recomendado por la Ley General de Sanidad.
Las mismas asociaciones se movilizarán un día después, el jueves 17 de abril a las 19h. para exigir la construcción de un hospital público en los terrenos del antiguo hospital militar del Aire. Los vecinos recuerdan que el 26 de septiembre de 2003 el Consejo de Ministros autorizaba la construcción del nuevo Hospital Central de la Defensa en Madrid “en los terrenos del antiguo Hospital Militar del Aire” y con un presupuesto aproximado de 85 millones de euros. El nuevo hospital sustituiría “al actual Hospital Central (antiguo Gómez Ulla) el cual, por sus dimensiones y estructura, demanda una excesiva cantidad de recursos humanos y conlleva unos gastos de mantenimiento muy elevados. Por otra parte, es intención del ministerio de Defensa, previo convenio con la Comunidad Autónoma de Madrid, que se ponga a disposición de la sanidad pública madrileña”.
En febrero de 2004 el Consejo de Ministros autorizaba “la celebración del contrato para las obras de la nueva sede del Hospital Central de la Defensa en Madrid”, un proyecto dotado con 84.723.313 euros que “tiene un indudable interés para la ciudadanía de Madrid, pues es intención del ministerio de Defensa que, además de cubrir la asistencia sanitaria del personal militar y sus familias, previo Convenio con la Comunidad Autónoma, se ponga a disposición de los beneficiarios de la sanidad pública madrileña”.
Las obras no aún no han empezado, ello a pesar de que el hospital de referencia del área IV, el hospital Ramón y Cajal, da cobertura sanitaria a más de 500.000 personas, el doble de lo recomendado por la Ley General de Sanidad, una situación que ha obligado en más de una ocasión a derivar pacientes a otros hospitales de Fuenlabrada y al Carlos III.
Todo esto es sólo el principio. Asociaciones de varias áreas sanitarias están preparando otras movilizaciones para el martes 29 de abril con el objetivo de ‘plantar batalla’ contra la privatización en cada una de ellas el mismo día.