En 1968 y, al amparo de la Ley de Asociaciones del régimen franquista, se legalizó en Madrid la primera asociación vecinal. Tal reconocimiento daba cobertura legal a una forma de organización ciudadana que, sorteando las dificultades impuestas por una rígida vigilancia policial, se había extendido en los barrios y municipios de la región. Ilegalizados los partidos políticos y los sindicatos situados fuera de la órbita del régimen, el movimiento vecinal se convirtió en cauce para expresar las demandas populares. Éstas tenían que ver con las precarias condiciones de vida impuestas por un acelerado y caótico proceso de industrialización y por una Administración plegada a intereses especulativos, como con el reconocimiento de los derechos y libertades de ciudadanía y el establecimiento de un régimen democrático.
Hoy, 40 años después, la región de Madrid está sembrada de huellas de la labor de las miles de personas anónimas que, durante este tiempo, han trabajado de forma desinteresada por construir una comunidad más habitable y humana. Las huellas se dejan sentir en zonas verdes salvadas de depredadores proyectos urbanísticos, en la salvaguarda de edificios históricos, en el acceso a viviendas dignas a miles de familias con escasos recursos, en la construcción de colegios, de centros sanitarios, en la recuperación y organización de fiestas populares y en la construcción cotidiana de una democracia participativa que rebosa los cauces establecidos por el modelo representativo, entre otras muchas.
Con motivo de la celebración del 40 aniversario del nacimiento del movimiento vecinal, la Federación Regional de Asociaciones de Vecinos de Madrid (FRAVM), que cuenta con 264 entidades y más de 125.000 asociados, y la Federación de Asociaciones de Vecinos de Barcelona (FAVB), han organizado de forma conjunta una exposición fotográfica que da cuenta de algunas de estas conquistas. Tras pasar por el Museo de la Ciudad de Madrid el pasado mes de diciembre, la parte madrileña de la muestra recala ahora en Coslada, en cuyo marco la coordinadora local de asociaciones vecinales ha habilitado un espacio específico sobre la historia del movimiento ciudadano del municipio.
1.200 imágenes esbozan, de manera aún superficial, la trayectoria de este movimiento en Madrid, narrada en 80 “batallas”, elegidas de forma consensuada por las asociaciones vecinales de la FRAVM, entre ellas la guerra del pan; la manifestación Por la amnistía, contra la carestía y por la legalización de las asociaciones de vecinos de la calle Preciados en junio de 1976; la conquista de la remodelación de 28 barrios de la capital que garantizó el acceso a una vivienda digna a 150.000 personas; la conquista, a pie de calle y a base de boicot masivos, de la mejora del transporte público en Coslada; la batalla por preservar el cosladeño Bosque del Humedal …
Aunque fue abierta al público el pasado 31 de marzo, la exposición será inaugurada mañana jueves a las 19.30h. en el Centro Cultural La Jaramilla con un acto en el que intervendrán Francisco Caño, miembro de la Junta Directiva de la FRAVM y coordinador de la exposición; Tomás Arcos, presidente de la Coordinadora de AAVV de Coslada; Pedro San Frutos, concejal de Participación Ciudadana del Ayuntamiento de Coslada; Nacho Murgui, presidente de la FRAVM y el alcalde de Coslada, Ángel Viveros. La FRAVM aprovechará el encuentro para presentar, por vez primera, el libro-catálogo de la muestra, un volumen de 330 páginas que recoge buena parte del material gráfico de la exposición , así como una serie de textos de especialistas y de dirigentes históricos del movimiento vecinal y de otros movimientos que, como el sindical, siempre han mantenido un estrecha relación con las asociaciones vecinales.
El público puede visitar la exposición en el citado centro cultural de lunes a viernes, de 9.30h a 14.30h y de 17h a 21.30h, hasta el 13 de abril. Ese día y en el mismo lugar, a las 19.30h la coordinadora local de AAVV cerrará la muestra con un encuentro sobre los “40 años de movimiento vecinal en Coslada”.