En el día de ayer conocimos una noticia que, aunque no nos ha cogido por sorpresa, llena de angustia y desesperación a muchos vecinos y vecinas de Puente Vallecas. Daniel García, Dani, el único médico que resistía en el turno de tarde en el Centro de Salud Vicente Soldevilla anunció que renunciaba a su puesto por no poder mantener una atención digna con los pacientes del centro y tras haber soportado un auténtico calvario que le ha obligado a mantener agendas de atención durante días de 70, 80 o 90 pacientes a la jornada.
Daniel García es uno de aquellos cientos de médicos residentes de medicina de familia y comunitaria que, deslumbrados por el trabajo que se desarrollaba en el Centro de Salud Vicente Soldevilla, todo un referente a nivel nacional en salud comunitaria desde finales de los años ochenta del siglo pasado, acudió para empaparse de su buen hacer. De esta manera se convirtió en uno de los “cien mil hijos de Juan Luis”, término acuñado por el gran salubrista Rafael Cofiño para referirse a los médicos residentes que trabajaron codo con codo con el conocido doctor Juan Luis Ruiz-Giménez, responsable del proyecto de salud comunitaria del Soldevilla que falleció en 2020 y que, como Daniel, continuaron su senda.
Pero desgraciadamente Daniel ha sido testigo en estos últimos años del desmantelamiento de la Atención Primaria en nuestra región, viendo como todo un referente nacional se ha convertido hoy en un centro desmantelado, que a pesar de atender a una población de más de 30.000 habitantes este mes de febrero va a dejar de dar asistencia médica en el turno de tarde.
La Federación Regional de Asociaciones Vecinales de Madrid, las asociaciones vecinales de Puente de Vallecas, la Plataforma en Defensa de la Sanidad Pública de Vallecas y las y los profesionales del centro llevan meses solicitando reuniones a la Consejería de Sanidad y a la Gerencia de Atención Primaria para buscar soluciones ante esta situación de extrema gravedad, pero el Gobierno regional ha ignorado hasta el momento las peticiones del tejido asociativo y solo ha mantenido una interlocución con los profesionales, a los que ha solicitado que trabajen para educar a la población “para que vaya menos al médico”.
El Centro de Salud Vicente Soldevilla presta una asistencia muy precaria desde el final de la pandemia de la Covid-19, especialmente durante el turno de tarde. Pero si en estos momentos sus profesionales no pueden hacer frente a las necesidades de la vecindad, ¿qué pasará cuándo finalice el desarrollo urbanístico del ámbito del Ecobarrio de Puente de Vallecas, que prevé aumentar la población de la zona en más de 5.000 personas, que deberán ser atendidas en el Vicente Soldevilla y en el CS Ángela Uriarte? Se pregunta el movimiento vecinal del distrito.
Para absorber este incremento de la demanda asistencial, las asociaciones vecinales y los profesionales del centro propusieron a la Gerencia de Atención Primaria hace dos años en la única reunión que han podido mantener hasta la fecha que destine a consultas de Atención Primaria la segunda planta del centro de salud, un espacio hoy vacío que albergaba los laboratorios que fueron trasladados al Hospital Isabel Zendal. Los responsables de la Gerencia se comprometieron a atender esta petición, pero hasta la fecha no han dado ningún paso en ese sentido.
Por todo lo anterior, la FRAVM y las asociaciones vecinales vallecanas exigen medidas urgentes a la Consejería de Sanidad para atender la grave situación asistencial en la que se encuentra el Centro de Salud Vicente Soldevilla. En esta línea, esta mañana han solicitado a la Consejería y a la Gerencia de Atención Primaria una reunión sin demora para buscar soluciones de emergencia que garanticen la atención sanitaria a los vecinos y vecinas y un plan que garantice la cobertura de atención a medio y largo plazo.
Esta demanda se repetirá esta tarde en la manifestación que las asociaciones vecinales y la Plataforma en Defensa de la Sanidad Pública de Vallecas organizarán hoy a las 19:00 y que había sido convocada con anterioridad a la noticia de la renuncia del último médico del turno de tarde del centro de salud. La marcha se iniciará en el propio centro, que se encuentra en el número 8 de la calle Sierra de Alfite, y finalizará frente a la Asamblea de Madrid.
Si la Consejería no atiende de manera urgente sus peticiones, las asociaciones vecinales vallecanas advierten que incrementarán sus protestas.
