Además, ante la tibieza en la respuesta de su consejero de Políticas Sociales y Familia, la plataforma, que está formada por asociaciones vecinales, AMPAs, los propios mayores del centro y otros colectivos de Usera y Villaverde, ha solicitado una reunión urgente con la presidenta regional, Cristina Cifuentes. “Y si antes del 15 de enero no tenemos el compromiso real de que la residencia permanecerá en Orcasur tal y como está, incrementaremos la protesta en la calle, tal y como decidimos ayer en la asamblea”, indica Piedad Martínez, presidenta de la Asociación Vecinal de Orcasur, antes de recordar que “hacía mucho tiempo que no se veía en el barrio una unión y una movilización como la de estos días”.
El pasado 2 de diciembre varios cientos de personas se manifestaron desde la residencia de la discordia hasta la plaza de la asociación de Orcasur y dos días antes otras tantas hicieron lo mismo en la Puerta del Sol, ante la sede del Gobierno regional. Lo hicieron y lo volverán a hacer mañana porque no se fían de las buenas palabras de los responsables de esta administración. Lo que quieren son compromisos por escrito.
Después de asambleas multitudinarias y de recoger 16.000 firmas en muy pocos días, el portavoz del Gobierno regional Ángel Garrido, anunció el 28 de noviembre la paralización del plan de cerrar la residencia pública, dispersar a sus usuarios y reemplazarlos por los chavales del Centro de Adaptación Cultural y Social (CACyS), ubicado en la calle Arturo Soria de Ciudad Lineal. Tras el anuncio, representantes de la plataforma procedentes de las asociaciones vecinales de Orcasur y Orcasitas, la Mesa de Orcasur del Foro Local y los centros educativos María Reina, Nuestra Señora de Monsterrat y Escuela Infantil San Simón y San Judas, se reunieron el 29 de noviembre con el consejero de Políticas Sociales y Familia. En el encuentro pidieron a Izquierdo el compromiso por escrito de que el centro de mayores no se iba a tocar, algo que debía llegar en la mañana del día siguiente. La esperada carta llegó en tiempo y forma, pero su contenido no convenció a los miembros de la plataforma. En ella, el responsable autonómico “confirma” el “deseo” del Gobierno regional “de que los mayores usuarios de la Residencia San José puedan seguir en la misma, tal y como ha venido siendo hasta la fecha”. Un “deseo” no es un compromiso, así que tras la misiva la plataforma ciudadana decidió mantener sus movilizaciones y mañana llevará su protesta hasta la cámara legislativa.
En el otro extremo de la ciudad, la Asociación Vecinal de San Juan Bautista, barrio que acoge el Centro de Adaptación Cultural y Social (CACyS) se unió desde el primer momento a los colectivos sociales de Usera para evitar su mudanza.
