Esta tarde, una representación de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca comparece ante la Subcomisión de análisis y posible reforma del Sistema Hipotecario Español constituida el pasado 22 de junio en el seno de la Comisión de Vivienda del Congreso de los Diputados.
La subcomisión, que nace de la presión social de los afectados y pretende dar, en palabras de su presidente, Pere Macías, una respuesta a “alguno de los elementos que más preocupa a la ciudadanía”, tiene por objeto emitir un informe sobre los elementos de mejora del sistema hipotecario español y, en particular, respecto a aquellas condiciones que puedan ser consideradas abusivas en un plazo de seis meses.
El grupo deberá finalizar sus trabajos en el plazo de seis meses y elaborar un informe que, tras ser aprobado por la Comisión de Vivienda, será elevado al Pleno de la Cámara para su debate y votación.
La PAH subraya que ‘ganar la batalla de la dación no sólo supone una victoria para las familias afectadas y una cuestión de justicia social’, sino que ‘significa romper la lógica perversa que imprimen los mercados y simboliza un primer paso para que la sociedad civil recupere el control democrático de la economía y el timón de la política, en estos momentos secuestrada”.
En el texto que, bajo el título Menos comisión, más democracia real!(ver fichero relacionado) defiende en el Congreso, la PAH aclara que “al hablar de la problemática hipotecaria, también hablamos de una situación de emergencia habitacional que está poniendo a prueba la capacidad de respuesta de las administraciones’. ‘De momento -añade- se están mostrando autistas e incapaces de reaccionar, anteponiendo los beneficios de la banca al interés general y actuando con el comportamiento propio de un Estado fallido. Es decir, incapaz de atajar la sangría de desalojos ni dar soluciones ante la vulneración de los derechos más fundamentales de las personas’.
“Quisiéramos advertirles -subraya- que si el sistema pretende bloquearnos, no tendremos más salida que bloquear al sistema, ya que frente a aquellos que desprecian, censuran y trapichean con la voluntad de un pueblo, es obligación de la sociedad civil organizada defender los derechos más elementales. Y si para ello tenemos que apelar a la desobediencia civil no violenta, lo haremos”.
La PAH, lamenta, asimismo, ‘el intento, por parte de la mesa del congreso, de secuestrar uno de los pocos mecanismos de participación democrática que tiene la sociedad civil’, en alusión al bloqueo político de la ILP sobre dación en pago, moratoria de desahucios y alquiler social que ayer no aprobó.
“El tiempo se acaba y la paz social toca a su fin. Esperemos -remacha- que tengan la suficiente madurez democrática, el sentido común y la valentía necesaria para situarse en el bando correcto”.