El pasado mes de noviembre, ‘y con la ausencia de Esperanza Aguirre que, finalmente no se atrevió a dar la cara, la Consejería de Transporte de la Comunidad de Madrid inauguraba, con la boca chica, la reforma de la avenida de los Rosales’, indica la entidad vecinal. Una reforma que, a pesar de años de reinvindicaciones ciudadanas, no contempló la mayor parte de las demandas del barrio dirigidas a mejorar la seguridad de la vía, la movilidad peatonal y los aparcamientos.
Tal y como sostiene AVIB, ‘el presupuesto de las obras se había desviado, en el último proyecto aprobado, a la ejecución de una estación de bombeo de agua que debería solucionar las inundaciones existentes hasta la fecha. Y es que, tras las obras de la M-30, los colectores generales se habían ejecutado a una cota superior a los de la Avenida’. Por desgracia, la puesta en marcha de la estación de bombeo, que ha supuesto la mitad del presupuesto de obra, no ha evitado que la avenida de los Rosales vuelva a ser protagonista de encharcamientos y bolsas de agua que ponen en peligro la circulación rodada y pueden provocar daños en las edificaciones colindantes.
‘Abandonadas las reivindicaciones vecinales por parte de la Comunidad de Madrid, con la excusa de los recortes presupuestarios, la estación de bombeo y la repavimentación de calzadas y aceras se muestra como una auténtica chapuza económica, técnica y social de cuyo únicos culpables son sus responsables políticos ¿ocurriría esto en el Paseo de la Castellana?’ se pregunta el vecindario de Butarque.