La 75ª Marea Blanca reclamará este domingo una cobertura sanitaria plena para las personas inmigrantes

Ante la celebración del Día Internacional del Emigrante, el 18 de diciembre, la Mesa en Defensa de la Sanidad Pública de Madrid (MESDAP) ha optado por dedicar su Marea Blanca mensual al derecho de las personas migrantes a disfrutar de la misma cobertura sanitaria que las autóctonas. A tal fin, invita a la ciudadanía a secundar una manifestación que el domingo 16 de diciembre arrancará a las 12:00 de la calle Sevilla y finalizará ante el Ministerio de Sanidad (Paseo del Prado, 18).

La 75ª Marea Blanca reclamará este domingo una cobertura sanitaria plena para las personas inmigrantes
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Un nuevo tercer domingo de mes, ¡y van ya 75!, los colectivos vecinales, de usuarios y pacientes, sindicatos y plataformas por la sanidad pública que conforman la MESDAP, la FRAVM entre ellos, volverán a salir a la calle para protestar contra los recortes y privatizaciones sanitarias y reclamar una sanidad 100% pública, universal y de calidad. Tras la exitosa 74ª Marea Blanca, que tuvo lugar el mes pasado en San Sebastián de los Reyes en forma de abrazo simbólico al Hospital del Norte, la mesa regresa este domingo al centro de la capital para llevar sus reivindicaciones al Ministerio de Sanidad. Ante sus puertas, recordará a la ministra María Luisa Carcedo la reunión que tiene pendiente con la Coordinadora Estatal de Mareas Blancas, “tal y como se solicitó, recordó y acordó con el equipo que continúa tras la salida de la ministra precedente”, recuerda la plataforma en un comunicado que ha hecho público esta mañana. En el encuentro comprometido, la coordinadora, en la que participa la MESDAP, tiene previsto defender su “Documento de 38 Medidas” para recuperar la calidad de nuestra sanidad pública. Un texto que, como recuerda la mesa, “está en su poder; y en manos de todos los partidos del arco parlamentario, de los gobiernos autonómicos y del Consistorio de Madrid”.

Además, los colectivos sociales subrayarán en su protesta “la pérdida del derecho sanitario de los inmigrantes” que se produjo con la aprobación del Real Decreto-Ley 16/2012, y que hoy no se ha recuperado del todo. A las personas inmigrantes sin documentación en regla “aún no les han retornado sus tarjetas sanitarias; no gozan como los demás de una sanidad pública universal en su verdadera concepción y dependen del tipo que esté al frente de su lugar de residencia de que reciban una u otra modalidad de documento justificativo para la atención sanitaria; deben además esperar tres meses en el limbo hasta poder solicitarlo; no se les aporta una seguridad clara que les respalde y tienen que pagar el 40 % de los coste de los medicamentos”, asegura la MESDAP en su nota. “Todo ello en medio de una sociedad cada vez más vulnerable -continúa-, en la que se han mermado derechos fundamentales, violados a base de argumentos despreciables para aplicar la lógica del mercado en vez de la inteligente filosofía de la democracia”.

Ante esto, la MESDAP asegura que no va “a consentir que se vulneren los derechos de los inmigrantes, piedra angular de la vulnerabilidad. Por tanto, en estos tiempos turbulentos en lo que se provocan huracanes interesados para incitar al odio hacia el otro, se fortalecen cada día para provocar la división como método de guerra sucia y señalarles como culpables de la marginalidad del resto de ciudadanos. Por ello hemos querido ponerlos por delante para desinflar la intoxicación y exigir el cumplimiento de los derechos humanos; por ello, los hemos colocado delante no sólo por sus propios intereses; sino como punta del iceberg, para que sean también la voz de miles de dependientes, ciudadanos y ciudadanas precarios, ancianos, mujeres, niños y jóvenes vulnerables, que vienen siendo desatendidos por esas mafias mercantilistas asentadas en nuestros sillones para gobernar el enorme barco de un pilar fundamental, nuestra sanidad pública, para apuntalar el futuro que están malversando en este presente doloroso en el que todo va tomando ya el tono gris de camino hacia lo incierto, sin futuro y con escasos signos de progreso”, concluye la mesa en su escrito.

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