La Comunidad de Madrid aprobó en el marco del Plan de Inversiones 2016-2019 la construcción en Carabanchel de los centros de salud de Abrantes, Comillas y Quince de Mayo, una actuación que calificó de alta prioridad. Pero estamos a junio de 2022 y no ha empezado a construir ninguno de los tres. El caso más preocupante es el de Comillas, ya que el Ayuntamiento no solo no ha firmado aún el convenio de cesión a la Consejería de Sanidad de la parcela que fue adjudicada en 2004 para albergar el nuevo equipamiento sanitario, sino que en los últimos días ha iniciado en ella obras de urbanización de unos jardines. El terreno de la discordia se encuentra en el número 22 de la calle Antonio Leyva y los vecinos y vecinas del barrio volverán a manifestarse hasta allí mañana martes por la tarde para reclamar la construcción de su prometido y comprometido centro de salud. La marcha, impulsada por la Asociación Vecinal Parque de Comillas, arrancará a las 20:00 desde el actual Centro de Salud de Comillas que, alojado en un local comercial de alquiler, se encuentra en la calle Eduardo Marquina, 33.
El colectivo vecinal lleva 18 años reclamando la apertura en el barrio de un centro de salud “moderno, de calidad y bien equipado”. Lo ha hecho con innumerables manifestaciones, concentraciones, recogidas de firmas, denuncias públicas y peticiones formales al Ayuntamiento y la Comunidad de Madrid para que éstas administraciones “cumplan lo prometido y agilicen el proceso de construcción”. Y es que “la estructura del actual centro de Comillas es obsoleta y muy deficiente, no permite unas condiciones dignas de trabajo para el personal y su falta de espacio impide que disponga de todos los servicios necesarios para dar una atención sanitaria adecuada”, indica Elena Sigüenza, portavoz de la Asociación Vecinal Parque de Comillas, antes de insistir en que el barrio no necesita un nuevo jardín sino usar la parcela de Antonio Leyva para lo que fue reservada. “Pedimos a Almeida que se deje de construir jardines que nadie entiende, ya que estarían entre dos parques ya consolidados, y firme de una vez el acuerdo de cesión de la parcela designada para el centro de salud. Llevamos demasiado tiempo esperando”, subraya la representante vecinal.
Recordemos que en 2003, la Federación Regional de Asociaciones Vecinales de Madrid (FRAVM) y el Ayuntamiento de Madrid firmaron un Plan Especial de Inversiones para Carabanchel que incluía el acuerdo de cesión al Gobierno regional de tres parcelas para construir otros tantos centros de salud en Carabanchel Bajo. Pero a día de hoy, los 78.000 habitantes afectados no han visto una piedra de estos equipamientos, de tal forma que desde hace más de 18 años se ven obligados a recibir asistencia sanitaria en tres precarios espacios ubicados en locales comerciales, los actuales centros temporales de Abrantes, Comillas y Quince de Mayo, y en un centro de salud de Arganzuela, el Paseo Imperial, al que están adscritas 11.000 personas de Carabanchel. Cada mes, la Comunidad de Madrid derrocha miles y miles de euros en pagar a propietarios privados el alquiler de esos espacios comerciales.
Todos los grupos políticos apoyan la vieja reivindicación vecinal de construir los tres centros de salud de Carabanchel Bajo, pero el Ejecutivo autonómico no parece tener mucha prisa en hacerla realidad y el Gobierno local contribuye a esta imperdonable demora. Por eso, las gentes de Comillas vuelven de nuevo a la calle, alarmadas esta vez ante el hecho de que la parcela reservada para su deseadísimo centro de salud sea usada para levantar unos jardines que nadie ha pedido.
