Las consecuencias de los recortes aplicados por el Ejecutivo central y por el Gobierno autonómico de Madrid en la sanidad pública son cada vez más graves. Más de 800.000 personas fueron privadas del sistema sanitario público con la aprobación del RD 16/2012. Miles de enfermos de hepatitis C no tienen acceso a Sovaldi, uno de los tratamientos de última generación más eficaces. En la Comunidad de Madrid la gestión de las donaciones de sangre fue privatizada y adjudicada a Cruz Roja, que cobra 67 euros por cada bolsa que las vecinas y vecinos donamos de forma altruista.
Recuperar la gestión pública de la sanidad para restablecer la calidad del servicio es el objetivo irrenunciable de la Mesa para la Defensa de la Sanidad Pública y del resto de organizaciones y plataformas profesionales que convocan la 28ª Marea Blanca, que volverá a inundar las calles del centro de Madrid como todos los meses desde hace más de dos años y medio.