El problema de las familias afectadas por la línea 7B de Metro en San Fernando de Henares está lejos de solucionarse. Dos años después de los primeros desalojos, 40 familias siguen sin una alternativa de vivienda digna, las primeras indemnizaciones aprobadas por la Comunidad de Madrid son claramente insuficientes, varios comerciantes llevan todo este tiempo con sus negocios cerrados y 600 viviendas presentan daños por la chapuza de una línea que continúa cerrada y, como mínimo, así permanecerá hasta el segundo semestre de 2024.
Con el fin de conocer de primera mano la situación de las familias damnificadas por esta tragedia, mostrarles su solidaridad y, junto a ellas, demandar soluciones justas y duraderas, la directiva de la Federación Regional de Asociaciones Vecinales de Madrid (FRAVM) se trasladará el próximo martes a San Fernando de Henares. Ese día a las 17:00 el presidente de la organización, Quique Villalobos, junto a otros miembros de su ejecutiva, se ha citado con la Plataforma de Afectados por la Línea 7B y con el alcalde de la localidad, Javier Corpa, a las puertas del Centro de Participación Ciudadana y Empleo Marcelino Camacho. Desde allí se desplazarán hasta la “zona cero” de los derribos causados por el Metro, y subirán a una terraza de un edificio del entorno desde la que podrán observar las enormes dimensiones del problema.
A las 18:30 comenzará en el interior del Marcelino Camacho la reunión mensual de la Junta Directiva de la FRAVM. En ella participarán vecinas y vecinos damnificados por el Metro, así como miembros de las asociaciones vecinales de la localidad AV Parque Henares y AV Jarama y de otros municipios del valle del Henares.
