En junio de 2005, el Ayuntamiento de Madrid firmó un convenio con Repsol YPF que contemplaba el desmontaje de doce surtidores de esta compañía en el centro de la capital. Como contrapartida, el Consistorio cedería varias parcelas en barrios periféricos para la instalación de nuevas gasolineras. Dos de ellas, situadas en la carretera de la Estación de Hortaleza y que suman 3.862 metros cuadrados y un total de 965 metros de edificabilidad, fueron cedidas a Repsol el 22 de diciembre de 2006 para instalar un surtidor.
El proyecto ha alimentado una activa campaña de movilización vecinal promovida por la AV La Unión de Hortaleza, bajo el lema “Ni un espacio verde menos”. La entidad insiste en que el proyecto carece de justificación alguna ya que en la actualidad, hay cuatro gasolineras en un radio de 2 kilómetros. Denuncia, asimismo, que el nuevo surtidor provocará problemas de movilidad en “una zona que actualmente ya tiene graves problemas de ón del tráfico”.