El transporte público, más caro a partir de agosto

Las tarifas del transporte público subirán por segunda vez en lo que va de año en la Comunidad de Madrid. La medida, que fue aprobada el pasado viernes 18 de julio por el Consejo de Administración del Consorcio Regional de Transportes, se aplicará a partir del próximo 1 de agosto y eleva al 7,5% la subida del precio del transporte público en 2008. Las consecuencias de esta decisión, denuncia la FRAVM, se dejarán sentir no sólo en la maltrecha economía familiar de los madrileños, sino en la calidad del aire, ya que el encarecimiento del transporte público desincetiva su uso.

El transporte público, más caro a partir de agosto
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El precio del Abono Joven y del Abono Normal de Transportes subirá por segunda vez en lo que va de año. A partir del próximo 1 de agosto, el precio de estos abonos se encarcerá entre un 3 y un 6%, dependiendo de la zona y la categoría. También el bono de 10 viajes para Metro de Madrid, Metro Ligero y Empresa Municipal de Transportes (EMT) experimentarán una ligera subida. El título de 10 viajes de Metro de Madrid, EMT, Metro Ligero, MetroSur, MetroNorte, MetroEste y Transportes Ferroviarios de Madrid (TFM) subirán una media de 4,48%. La revisión tarifaria no afecta al billete sencillo monomodal y combinado, válidos para las redes de Metro de Madrid, EMT y Metros Ligeros, que seguirán costando 1 euro y 1,90 euros, respectivamente. Tampoco se modificará el suplemento que cobran algunos de estos transportes para ir al Aeropuerto de Madrid-Barajas, ni el Abono Tercera Edad y el Abono Anual.

El Consorcio señala que la polémica medida responde al objetivo de “no producir distorsiones en el sistema y desplazamientos indeseados de los usuarios de unos títulos a otros” como consecuencia de la decisión del Ministerio de Fomento de anticipar la subida de tarifas correspondiente al año 2009 en los servicios de transporte interurbano por carretera para paliar la situación que atraviesa el sector por el incremento del precio del combustible.

La orden, sin embargo, se refiere exclusivamente a los medios de transporte que funcionan con gasóleo, es decir, a los autobuses, por lo que quedarían descartados otros medios como el metro, el tranvía o el metro ligero cuyos usuarios, sin embargo, sí sufrirán el “tarifazo”.

A juicio de la FRAVM, las administraciones no deberían cargar todos los efectos de la crisis en la ciudadanía. Insta, por tanto, al Gobierno regional a que estimule el ahorro privado fomentando el uso del transporte público, más cómodo, rápido y económico y más respetuoso con el medio ambiente que el vehículo privado, conteniendo para ello el precio de las tarifas. Porque la necesidad de apretarse el cinturón para hacer frente a la crisis económica no debe, en ningún caso, llegar a ahogar a los de siempre.

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