Casi 5.000 firmas individuales que se unen a la resolución aprobada en el último pleno del Ayuntamiento de Madrid, que salió adelante gracias al apoyo de Ciudadanos, Más Madrid y el PSOE y la abstención de PP y Vox, lo que representa a la inmensa mayoría de la población de la capital. Junto a las rúbricas, las asociaciones vecinales PAU del Ensanche de Vallecas, La Unión-UVA de Vallecas y La Colmena de Santa Eugenia han registrado un escrito en el que solicitan una reunión con la consejera de Medio Ambiente, Paloma Martín, para abordar el problema, algo que ya hicieron el pasado mes de mayo con su predecesor. Tras recibir la petición, Carlos Izquierdo se puso en contacto con estas entidades para invitarles a celebrar un encuentro con responsables de la Consejería pasadas las elecciones, un hecho que siguen esperando.
La FRAVM, por su parte, solicitó a la consejera una reunión en septiembre para tratar este y otros asuntos relativos a la gestión de residuos en la comunidad autónoma, y ayer mismo volvió a hacerlo, esta vez con carácter urgente, dada la situación del vertedero de Alcalá de Henares y las últimas declaraciones realizadas por Martín y otros responsables políticos de la Comunidad de Madrid como Ignacio Aguado o Pedro Rollán. Esperamos que Paloma Martín atienda cuanto antes nuestra demanda.
Mientras tanto, las asociaciones vecinales citadas han convocado una nueva manifestación para el domingo 17 de noviembre que a partir de las 12:00 transcurrirá entre la calle Real de Arganda y la Junta Municipal de Villa de Vallecas. Además, la Asociación Vecinal PAU del Ensanche de Vallecas ha invitado a las familias del barrio a participar mañana a las 17:00 en una acción de protesta que tendrá lugar a las 17:00 en el parque infantil que se encuentra en la calle Pilar de Madariaga Rojo con la Avda. de las Suertes. Niños, niñas y mayores ataviados con mascarillas contra la contaminación atmosférica y odorífera se congregarán en el lugar para hacerse una foto denuncia.
Indignadas por la actitud de algunos políticos
El alcalde de Alcalá de Henares ha anunciado que el vertedero de la localidad llegará a su tope máximo el próximo lunes, 11 de noviembre, y que entonces procederá a sellarlo. ¿Es casualidad que esto se produzca justo el día después de las elecciones generales? Evidentemente, no. Las asociaciones vecinales se sienten rehenes del cálculo electoral, y temen que, una vez pasados los comicios, las más de 200.000 toneladas anuales de basura de los municipios del Henares comiencen a llegar a Valdemingómez de la forma que sea. Según sus últimas intervenciones públicas, tanto el alcalde de Madrid como su delegado de Medio Ambiente están dispuestos a aceptar el convenio que les han propuesto la Mancomunidad del Este y el Gobierno regional, haciendo caso omiso a la citada resolución del pleno de la ciudad, que según fuentes municipales no es vinculante. ¿Serán capaces de despreciar de este modo la voluntad mayoritaria de la ciudadanía de la capital?
La FRAVM, sensible al hartazgo de las gentes de Alcalá de Henares, muy bien representado por su Federación Comarcal de Asociaciones Vecinales, entiende que se debe buscar cuanto antes una solución a la situación de su vertedero, pero esta no puede pasar por trasladar el problema al vecindario de Villa de Vallecas y de otras zonas limítrofes a Valdemingómez, que llevan más de treinta años soportando sus emisiones tóxicas. Tal y como han trasladado esta mañana a la consejera en su carta, las entidades vecinales no están dispuestas “a admitir dicha posibilidad dado que el Ayuntamiento de Madrid está implementando medidas para la eliminación de los olores procedentes de su instalación y el aumento en el número de residuos tratados” no solo “daría al traste con dichos planes” sino también con el cierre programado de la incineradora, “algo que los vecinos y vecinas de Vallecas llevamos años esperando”.
Para la FRAVM es absolutamente incomprensible que el alcalde de Alcalá y la Comunidad de Madrid, que durante la pasada legislatura estuvieron tres años sin hacer absolutamente nada mientras el vertedero de la Mancomunidad del Este se llenaba y la construcción de la planta de tratamiento de Loeches se retrasaba una y otra vez, no quieran plantearse ninguna alternativa diferente a Valdemingómez.
Pero las prisas y la improvisación de la que están haciendo gala en las últimas semanas puede salirles muy cara. La FRAVM estudia en estos momentos llevar el caso a los tribunales si en los próximos días o semanas los camiones de basura de las comarcas del Henares comienzan a llevar su carga a las instalaciones del parque tecnológico. Y es que, en contra de la opinión de Paloma Martín, hay mucha “justificación técnica y jurídica” que avala que esto no se produzca.
¿Acaso en la Comunidad de Madrid ha considerado el límite de carga del parque tecnológico, los tiempos de parada de sus instalaciones, sus costes, las condiciones de seguridad a cumplir, los contratos con las empresas concesionarias, y un largo etcétera, antes de apoyar el traslado de la basura de la Mancomunidad del Este a Valdemingómez? No encontramos ningún informe técnico que lo sostenga. Lamentablemente, todo apunta a que Paloma Martín tiene preparada ya la anunciada declaración de emergencia sanitaria para poder trasladar cuando así lo desee los residuos del Henares a Vallecas, sin datos solventes que la sostengan.
La realidad es que cuesta creer que pueda declararse una emergencia ante un hecho tan previsible como la colmatación de un vertedero. Y también que en todo el territorio de la Mancomunidad del Este no exista una alternativa para poder acoger temporalmente los residuos que hoy acoge el vertedero de Alcalá. Por último, las asociaciones vecinales no conocen ninguna norma que avale que la Comunidad de Madrid pueda obligar a un ayuntamiento a asumir los residuos de otro territorio. Sea como sea, Vallecas y sus asociaciones vecinales no se van a quedar paradas.
