Ayer, la organización del Mad Cool hacía una presentación pública de la nueva ubicación del festival a través de una recreación digital en sus redes sociales. En ella hacía referencia a su “nuevo hogar”, un hogar que se encuentra en un espacio idílico rodeado de bosque. Nada más lejos de la realidad.
Los vecinos y vecinas de Villaverde, a través de su Coordinadora de Asociaciones Vecinales, denuncian dos hechos: primero, cómo se ha ubicado este macrofestival en su distrito con el fin de evitar las molestias a los vecinos y vecinas de Valdebebas que rechazaban sistemáticamente esta instalación en su barrio. Y segundo, cómo el “lavado de cara” de la operación se hace a costa de invisibilizar de manera sistemática y clasista el lugar en el que se ubica. Villaverde no es un idílico paraje de bosques y naturaleza, el Mad Cool viene a situarse en un distrito que sufre crisis tras crisis el desmantelamiento de sus polígonos industriales y en el que, donde antes había empleo, se están localizando instalaciones ruidosas y contaminantes: tales como macroplataformas logísticas o este mismo festival.
Villaverde existe y sus asociaciones quieren que quede claro tanto para la organización del evento como para los responsables públicos que legitiman estas prácticas. También quieren que quede claro para las miles de personas que vendrán al festival. El barrio requiere inversión, atención, visibilizar sus problemas para darles solución y potenciar sus virtudes.
¿Qué medidas va a poner en marcha el Ayuntamiento de Madrid para que, además de molestias, pueda tener un impacto positivo? ¿Dará espacio a empresas del distrito para que desarrollen servicios? ¿Habrá un lugar para visibilizar a talentos culturales y musicales de Villaverde? ¿Habrá descuentos en las entradas para los vecinos y vecinas? La coordinadora vecinal duda de que así sea.
De momento, lo que tenemos es 185.000 metros cuadrados de recinto para uso privado que ocasionará molestias al vecindario. También tenemos, por ahora, subrayan los colectivos vecinales, “el desprecio y el ninguneo”. La propia Asociación Vecinal Colonia Marconi ha presentado alegaciones ante el intento de convertir el barrio en un parking para el evento.
Los responsables aún están a tiempo de revertir (en parte) esta situación y, como mínimo, rectificar esta actitud.
La Coordinadora de Asociaciones Vecinales de Villaverde está compuesta por los siguientes colectivos: AVIB, AV La Incolora, AV Los Rosales, AV La Unidad de Villaverde Este, AV La Unidad de San Cristóbal, AV San Nicolás, AMIFIVI, AV Los Hogares, AV Comerciantes de Villaverde, AV Colonia Marconi, AV Arechavaleta.
