El Ayuntamiento firmó un contrato con McDonald’s el 18 de febrero 1992. A cambio, la compañía de comida rápida estaba obligada a pagar un canon único de 125 millones de pesetas. Ahora, un cuarto de siglo después, el Consistorio vuelve a convocar una licitación pública para la “concesión del uso privativo del dominio público municipal para la explotación y mantenimiento del quiosco municipal existente en la zona verde situada en la avenida de España, con vuelta calle Mare Nostrum, de este término municipal, destinado a restauración actividad bar-restaurante, por un período de quince años” (BOCM del 16.12.2016), con el pago de un canon anual de 159.316,91 euros.
La única justificación que esgrime el Ayuntamiento de Majadahonda para ceder un espacio público a una empresa privada del sector de restauración es “la necesidad de dar continuación al servicio de hostelería para revitalizar su entorno inmediato”. El pasado 19 de enero, la Asociación de Vecinos del Municipio de Majadahonda presentó unas alegaciones a las bases del concurso, solicitando la suspensión de la convocatoria y la apertura de un periodo de reflexión y consulta con los vecinos para estudiar y valorar el mejor uso que se le podría dar a este espacio, “insistimos público, cuyo entorno no necesita revitalización, ya que está sobradamente dotado de servicios”, asegura la entidad.
“Sin duda, hay otros mejores usos de un espacio público que el de un bar-restaurante de carácter privado que genera, actualmente, conflictos medioambientales con el entorno”, subraya la asociación vecinal.