La plantilla de los centros deportivos municipales de Madrid llevó a cabo el pasado 29 de junio su primera jornada de huelga para frenar el plan de despido de 400 trabajadores y trabajadoras fruto de los procesos de “estabilización de empleo temporal” iniciados como respuesta a la denuncia de la UE por las elevadas tasas de temporalidad de los empleados públicos en España. Tras el éxito de la movilización, el próximo jueves, 4 de julio, volverá a la huelga, y se manifestará a las 12:00 ante el Ayuntamiento de Madrid, en la plaza de La Cibeles.
La FRAVM, muy preocupada por el deterioro del servicio de unos espacios deportivos esenciales para la población de la capital, apoya las justas demandas de sus empleados y empleadas y su movilización para conseguirlas, siguiendo la estela de otros colectivos como la Plataforma de Trabajador@s y Vecin@s por la Remunicipalización y Gestión directa de los Servicios Públicos de Madrid.
El 70% de la plantilla de los centros deportivos municipales es temporal. Pero, tal y como informa la plataforma, “lejos de solucionar esta situación, la desastrosa interpretación por parte del Ayuntamiento de Madrid de estos procesos ha provocado que una parte importante de la plantilla de interinos, la mayoría discontinuos de verano, con muchos años de servicio en los polideportivos municipales, se queden en la calle, sin haber podido optar ni siquiera por oposición a sus plazas. En las categorías mayoritarias sólo han salido a oposición 2 plazas en una categoría y 14 plazas en la otra de personal laboral, y se ha excluido al personal de verano, otorgando una valoración inútil a los numerosos años que llevaban prestando sus servicios, sin ninguna posibilidad de volver a ser contratados”, asegura la plataforma.
Así, el Ayuntamiento planea el despido de 400 personas, lo que, además de provocar un auténtico drama para sus familias, supondrá un clarísimo deterioro del servicio que se presta cada verano en nuestros barrios, empezando por el relativo a las piscinas.
“En lugar de reforzar los centros deportivos con plantillas estables, más acordes con la demanda de las actividades deportivas ofertadas en estos centros, el gobierno municipal despide a trabajadores/as que han demostrado durante años su empeño y dedicación para ofrecer un servicio deportivo y recreativo de calidad”, indica la plataforma, que aprovecha la ocasión para volver a demandar, con el sostén de la FRAVM, “la remunicipalización de todos los polideportivos privatizados en sus diferentes modalidades y la gestión directa real de los de nueva construcción. De esta forma, se ampliaría la oferta deportiva municipal de Madrid, y se abaratarían los costes derivados de la gestión privada, lo que supondría un ahorro para las arcas municipales que podría revertir en ampliar las plantillas y mantener la actual, sin que hubiese despidos”, concluye la plataforma.