El equipo de gobierno del Ayuntamiento de Madrid tumbó las más de 1.000 alegaciones e ignoró las 5.000 firmas de otros tantos vecinos que se oponen al plan especial proyectado por el Consistorio para la finca de Torre Arias, en virtud del cual se construirá un aparcamiento de dos alturas y un nuevo edificio de 1.300 m2 al lado del palacio. Para ello, se derribarán construcciones históricas de la finca como el invernadero de cristal, la casa del jardinero, la casa madera, el matadero, la vaquería, caseta de aperos, casa del arroyo, perreras y otras. El plan abre también la posibilidad de ceder parte de la histórica finca a la Universidad de Navarra, vinculada al Opus Dei, una petición que la institución ha hecho llegar al Ayuntamiento.
Las asociaciones y colectivos vecinales que han dado vida a la Plataforma por el Uso Público de la Finca de Torre Arias sigue luchando para garantizar la salvaguarda del patrimonio histórico de este privilegiado espacio, por lo que han presentado una denuncia ante la Fiscalía de Patrimonio de la Comunidad y han solicitado la Declaración de Bien de Interés Cultural de la finca.
No es el único paso que darán en el frente judicial: con la ayuda de los técnicos de Madrid Ciudadanía y Patrimonio, presentarán un recurso judicial contra el Plan Especial para garantizar su salvaguarda. Mientras no sea así, la Plataforma por el Uso Público de la Finca se concentrará todos los últimos domingos de mes a las 12h.
La plataforma denuncia, asimismo, que la empresa privada que ha realizado los trabajos de tala y desbroce de los jardines de la finca “han perpetrado un importante estropicio en la arboleda y caminos de la finca”. Urge, por tanto, intensificar las movilizaciones para que la ciudadanía madrileña pueda disfrutar del privilegiado patrimonio arquitectónico y natural que esta finca esconde. La próxima cita es el domingo 28 de septiembre a las 12h en la puerta de la finca situada en la calle Alcalá.