“Primero cerraron la de Colmenar Viejo. Luego, con la excusa de unas obras, la de Vicálvaro. Parecía que los directivos de Caja Madrid se habían tomado un respiro en su labor cercenadora de todo lo que suene a social y a cultural cuando nos enteramos que se está preparando para finales de julio el cierre de una buena parte de la red de bibliotecas: Barrio de Bilbao, Aluche, Doña Carlota en Vallecas, Móstoles, Morata de Tajuña, Torrejón de Ardoz…” De este modo comienza un comunicado hecho público por la Asociación de Vecinos de Aluche (AVA) contra la decisión de la entidad bancaria de cerrar la biblioteca de la calle Escalona. Junto a ésta, en el marco de su plan de “recortes presupuestarios”, la caja clausurará entre 10 y 14 bibliotecas más y otros tantos centros de mayores, uno de cada cuatro de estos equipamientos de su red. El caso de la biblioteca de Latina es especialmente chocante, ya que ha permanecido cerrada año y medio por obras de mejora. “Se acababa de invertir mucho dinero en rehabilitarla. Eso se llama derrochar y no ahorrar”, sostiene la AVA, que enmarca la decisión en el “intento de privatizar del todo las cajas de ahorro”, para que “pasen de ser entidades financieras obligadas a reinvertir todo o parte de sus beneficios en la gente que se los proporciona a ser otros vulgares bancos más que buscan sólo y exclusivamente sus beneficios”.“Está claro que es más lucrativo cerrar bibliotecas y vender los locales, pero la Obra Social de Caja Madrid es una forma de ganar prestigio y además de devolver algo del dinero que llevamos mucho tiempo confiándoles los madrileños”, afirma la entidad ciudadana.
En la misma línea, la asociación vecinal Madrid Sur rechaza la clausura de otras dos bibliotecas de la caja en Puente de Vallecas: la del barrio de Doña Carlota (calle Puerto del Rey, 8), que ya ha sido cerrada, y la que se encuentra en el número 44 de la avenida de Buenos Aires, que en unos días tendrá el mismo destino. El distrito “se queda sin un servicio a sus vecinos que llevaba funcionando 25 años”, subraya el colectivo, antes de expresar su “disgusto’ por una medida que va a afectar ‘especialmente a los jóvenes que utilizan esos espacios de lectura para poder estudiar y preparar sus asignaturas”. Por ello, al igual que la AVA, pide a la dirección de la caja “que reconsidere la decisión de cierre de estas bibliotecas y de todas las que tenga intención de hacer lo mismo”.
Madrid Sur critica también la clausura de más de 10 centros de mayores y teme la medida afecte a los de San Diego, Puente de Vallecas y Entrevías, del mismo distrito. De momento, y esto es algo inédito, “los han cerrado por vacaciones y no se sabe cuáles permanecerán abiertos a partir de septiembre”, sostiene Madrid Sur en una nota de prensa. “Caja Madrid aplica un duro recorte social que perjudica a los ciudadanos que menos ingresos tienen porque siempre han sido servicios gratuitos financiados con el ahorro de todos”, concluye.