El ministro de Política Territorial y Memoria Democrática, Ángel Víctor Torres, anunció el pasado mes de marzo la creación de un Centro Museo de la Memoria Democrática, que estaría emplazado en el centro de Madrid.
“Consideramos que la creación de este Centro de la Memoria supone un paso adelante en la restitución de la dignidad de las víctimas del franquismo en pos de la vedad, justicia y reparación. Dado que en Madrid existen lugares emblemáticos en los que la dictadura franquista se ensañó en su represión, creemos que el emplazamiento del centro anunciado debería ubicarse en uno de estos lugares”, sostiene la Plataforma por un Centro de Memoria de la Cárcel de Carabanchel, que está formada por colectivos memorialistas y entidades vecinales y sociales.
Alguno de esos lugares tienen ahora otras funciones, como podría ser la antigua Dirección General de Seguridad en la Puerta del Sol, actual sede de la Comunidad de Madrid, lo que haría complicado el cambio.
Pero el solar de la antigua cárcel de Carabanchel, centro de represión y lucha por la libertad y la justicia social, seguramente el centro penitenciario franquista más emblemático de todo el estado, ahora convertido en un solar desde su demolición en el año 2008, sin duda reúne las condiciones para poder albergar dicho centro, tratándose de un solar de titularidad del Estado, donde por lo tanto, puede construirse sin obstáculos.
Por ello, “levantar un Centro de Memoria en este espacio de memoria (solicitada su declaración por entidades memorialistas y vecinales hace más de un año), sería coherente con la política de memoria desarrollada por países avanzados, que han convertido lugares de represión en estos centros de memoria, al margen de la situación central o periférica de su emplazamiento”, concluye la plataforma.