La tragedia causada por la mala praxis del Gobierno regional en la construcción de la línea 7B de Metro a su paso por San Fernando sigue agrandándose. El pasado miércoles, la Consejería de Vivienda, Transporte e Infraestructuras de la Comunidad de Madrid anunció la apertura un procedimiento de declaración de ruina para los edificios correspondientes a los portales 3 y 4 del número 7 de la calle Rafael Alberti, cuyos moradores fueron desalojados en septiembre de 2022, y para el inmueble situado en el número 9 de la misma calle (cuyas familias abandonaron sus casas en diciembre). En total, 18 nuevas viviendas que serán demolidas en febrero o marzo. 18 nuevas familias que no podrán volver jamás a sus casas. 18 nuevas vidas rotas que se suman a las 41 que ya han visto desaparecer sus viviendas o bajos comerciales bajo la piqueta.
Recordemos que más de 600 viviendas están afectadas por la chapuza más grande de la historia del transporte en la Comunidad de Madrid y que la línea 7B sigue cerrada por unos trabajos de consolidación que a diario deben soportar miles de vecinos y vecinas junto a sus casas, con el miedo de que el lugar donde viven sea el próximo en caer.
Es necesaria una solución duradera y consensuada con las y los damnificados. Por ello, el viernes a las 17:00 nos concentraremos junto a la Plataforma de Afectados por la Línea 7B con el fin de trasladar esta exigencia y solidarizarnos con las nuevas familias que perderán su vivienda.
