El primer socavón se produjo el pasado 2 de noviembre debido, al parecer, a una rotura de una tubería de agua, y obligó a desalojar un edificio afectado ante los daños provocados (el inmueble cedió unos centímetros). El segundo, en el que cayó un vehículo, tuvo lugar tres días después y provocó un cráter de más de 100 metros cuadrados. A pesar de su amplitud y profundidad, nadie se ha hecho hasta el momento responsable. Los dos socavones se encuentran a una distancia de tan solo 50 metros, lo que hace suponer que ambos compartan el mismo origen.
Ante estos hechos y con objeto de responder a la lógica preocupación de la vecindad de la zona, que ya este verano se alarmó “por la caída de varios grandes árboles, en apariencia sanos, y sin motivo aparente”, la Asociación Vecinal La Nueva Elipa ha hecho público esta tarde un comunicado en el que pide que se tomen “medidas para evitar que se sigan produciendo estos sucesos”. Aunque afortunadamente aún no se han producido daños personales, “si la situación no varía, en cualquier momento podemos lamentar alguna tragedia”, subraya en su nota. De hecho, a la entidad le sorprende que “no haya ocurrido nada grave en ese sentido, teniendo en cuenta que Marqués de Corbera es una calle muy concurrida a cualquier hora del día”.
Por ello, La Nueva Elipa exige “la revisión de la red de agua y saneamiento por parte del Canal de Isabel II, con la instalación de nuevas redes, ya que las actuales son muy antiguas y no están en condiciones (algo que incluso han manifestado los propios operarios del Canal de Isabel II) y la inmediata puesta en marcha de un estudio geotécnico que compruebe en qué situación están los terrenos en los que se asienta fundamentalmente la Avenida Marqués de Corbera, para que no tengamos que arrepentirnos posteriormente”.
Además, “asistiremos, con los vecinos y vecinas de la zona, al próximo pleno, que se celebrará el martes día 13 de noviembre para plantear nuestra preocupación, pedir responsabilidades y para que se acometan las medidas necesarias para solucionar los problemas”, asegura la entidad, que no descarta emprender “otras acciones y medidas de presión si no se actúa con celeridad”.