La sede de la Unión de Madrid de CCOO, en la calle Lope de Vega, 38, abrió ayer sus puertas a las decenas de representantes de organizaciones sociales que acudieron a la invitación de CCOO y UGT con la intención de “sumar fuerzas contra la política de recortes que lleva a cabo el Gobierno del PP” e “intensificar la movilización social para hacerla, si cabe, más contundente y más masiva”.
Al término del encuentro, las organizaciones consensuaron un calendario de movilizaciones que se desarrollarán durante los meses de agosto y septiembre y que culminará con una marcha ciudadana que partirá desde “todos los rincones de la geografía española” hacia la capital el 15 de septiembre para “decir no a las medidas que llevan a nuestro país a la ruina y que suponen una agresión, sin precedentes, a los derechos laborales y sociales y a nuestro Estado de bienestar”.
Durante el mes de agosto no se bajará la guardia ante una política promotora de unos recortes que el secretario general de CCOO, Ignacio Fernández Toxo, calificó como“tremendamente lesivos, inútiles y suicidas en términos económicos porque empobrecen a la mayoría de la sociedad y deterioran el modelo social”. Así, a las movilizaciones sectoriales que se vienen desarrollando y a la jornada de lucha programada para el 12 de septiembre por las trabajadoras y trabajadores de las administraciones públicas, se convocarán concentraciones cada viernes, coincidiendo con los Consejos de Ministros ante edificios ’emblemáticos” en todas las ciudades del país.
El 15 de septiembre, las centrales sindicales emplazarán al Gobierno a que convoque un referéndum para que la ciudadanía se pronuncie sobre las medidas aprobadas. Si no lo hiciera, anunciaron, “seremos las organizaciones de la Cumbre Social las que llevemos a cabo la convocatoria de un referéndum” hacia la segunda quincena de octubre y, con el resultado de la misma, actuar en consecuencia’ promoviendo, si fuera necesario, una huelga general de “carácter ciudadano”.