La inquietud y la rabia han regresado al barrio de Saconia, en Moncloa-Aravaca, ante el nuevo intento del dueño de Los Nogales de construir una residencia privada en una pequeña parcela rodeada de viviendas de la calle San Gerardo, 11 de Madrid. Lorenzo Berlanga, a través de su empresa Residencias Asistidas, ha conseguido que el Ayuntamiento de Madrid aprobase, el pasado13 de junio, un Plan Especial que ha justificado como de Interés General, cuando el interés es exclusivamente de la empresa propiedad del solar, teniendo un barrio entero en contra. Con este Plan Especial pretenden construir un vial de acceso al solar para que después la propietaria del terreno pueda ejecutar su polémico proyecto.
El Boletín Oficial de la Comunidad de Madrid publicó el 5 de julio el “Plan Especial para la mejora de las Redes Públicas en la parcela número 20.579 del Inventario del Patrimonio Municipal del Suelo del Ayuntamiento de Madrid, situada en la calle de San Gerardo número 11B, distrito de Moncloa-Aravaca”, abriendo de esta forma un periodo de información pública hasta el 5 de agosto en el que sin duda las comunidades de vecinos y personas afectadas presentarán alegaciones.
Es la cuarta vez que Residencias Asistidas intenta llevar a cabo su plan de levantar una residencia con tres plantas de aparcamiento en un solar ubicado en el centro de una manzana, rodeada de viviendas de vecinos y vecinas. Para ello, el Ayuntamiento pretende construir un vial de acceso al solar, para tráfico rodado, llevándose por delante una zona infantil y espacios interbloques que desde 1963 los vecinos y vecinas usan como zona estancial y de esparcimiento. En las tres veces anteriores, la vecindad, con la Asociación Vecinal Poetas-Dehesa de la Villa a la cabeza, paralizó el inicio de las obras con movilizaciones en la calle y en los despachos, además de un victorioso contencioso administrativo. No en vano, el Plan Especial publicado el pasado viernes nace con el fin de trascender una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) de septiembre de 2022, que confirmó otra decretada por el Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 26 de Madrid que declaró nulo el acuerdo del Ayuntamiento que dio luz verde a las obras accesorias de urbanización del proyecto.
En esta parcela de la calle San Gerardo el dueño de Los Nogales proyecta levantar una nueva residencia privada
Tras la sentencia del TSJM, que demostró que el Ayuntamiento había aprobado el proyecto incumpliendo el PGOUM, que califica el terreno de la discordia como área estancial, la vecindad respiró aliviada, aunque sabía que no podía cantar victoria hasta que Residencias Asistidas renunciase a su proyecto o aceptase una permuta de la parcela por un terreno municipal que realmente reúna las condiciones para el proyecto empresarial, una solución defendida por el colectivo vecinal. Desde entonces, la Junta de Distrito había trasladado que la permuta es un proceso largo pero Urbanismo estaba con ello, sin haber visto nunca ningún avance en los últimos años, hasta que el pasado 24 de junio, en una reunión de la asociación con la Junta, esta comunicó que “la residencia se va a hacer”. “Sentimos que desde el Ayuntamiento nos han estado engañando durante estos dos años, para ganar tiempo y elaborar su Plan junto con la propiedad del solar, para seguir adelante con sus intenciones”, sostiene la AV Poetas-Dehesa de la Villa, que una vez más ha comenzado a movilizarse para frenarlas.
Así, el pasado jueves más 150 personas participaron en una asamblea vecinal, junto a la parcela de la discordia, en la que acordaron retomar las protestas y reivindicaciones. La primera tendrá lugar este jueves, 11 de julio. Vecinas y vecinos asistirán a las 17:00 al Pleno de la Junta de Moncloa-Aravaca, aprovechando que uno de los puntos del orden del día (a propuesta de los grupos políticos de la oposición), tratará sobre el polémico Plan Especial y la construcción del vial de acceso al solar.
El colectivo de barrio recuerda que para construir la residencia es necesario previamente realizar un vial para el tráfico rodado invadiendo una zona peatonal, “lo que modificaría el tránsito peatonal de los vecinos y generaría humos y ruidos a escasos 3m de las ventanas de las viviendas”. Pero además, “desaparecería el pequeño parque infantil que lleva siendo zona infantil consolidada desde los años 70” y además “tendrían que talar un cedro con más de 10m de altura”.
El proyecto de la residencia que hasta ahora ha manejado Residencias Asistidas contempla tres plantas de garaje y cinco plantas para residentes, en un edificio que quedaría a escasos metros de las viviendas que rodean al solar, pisos que “perderían mucha luz”. “En la cubierta irían las máquinas de climatización, así como las chimeneas de ventilación de las plantas de garaje y las chimeneas de la cocina, lo que produciría ruidos y humos, con las consiguientes molestias para los vecinos”, asegura la asociación, antes de concluir: “consecuentemente, el bienestar de los vecinos se vería gravemente mermado con la pérdida de condiciones de habitabilidad del barrio. No podemos dejar que devalúen nuestro barrio y nuestras vidas, para el beneficio de intereses privados”.
