A medida que pasan las semanas aumentan en Usera y Villaverde la rabia y el malestar contra el Ayuntamiento de Madrid por persistir en el proyecto de construcción de un crematorio junto al Tanatorio de la M40, a menos de 250 metros de viviendas, establecimientos comerciales, centros educativos y de trabajo y parques. No es para menos. Sus asociaciones vecinales y la FRAVM acaban de recibir una resolución del Consistorio por la que desestima el recurso de reposición que presentaron hace unas semanas contra la concesión de la licencia de apertura del horno crematorio. En vez de ponerse del lado de la vecindad con el fin de salvaguardar su salud, el Ayuntamiento se reafirma en su decisión, aduciendo que lo hace porque la Consejería de Medio Ambiente, Agricultura e Interior de la Comunidad de Madrid ha otorgado su preceptiva autorización administrativa a la actividad de crematorio para el proyecto de Parcesa. Es decir, pasa la pelota de la responsabilidad al Gobierno regional, poniéndose de lado en este espinoso asunto. La resolución municipal contra los recursos de reposición sirve también para que el propio Ayuntamiento se enmiende a sí mismo, ya que deja claro que la famosa sentencia del Supremo que los responsables del equipo de Gobierno usaron durante semanas como argumento para conceder la nueva licencia, es “meramente declarativa, que se limita a declarar la nulidad de la resolución que denegaba la licencia pero no reconoce al recurrente el derecho a que se conceda dicha licencia”. Que es exactamente lo que siempre han defendido las asociaciones vecinales.
Así las cosas, ante la cerrazón del Ayuntamiento, los colectivos ciudadanos de Usera y Villaverde, mientras estudian la posibilidad de presentar un recurso contencioso administrativo, redoblan su protesta en la calle. Tras la manifestación que tuvo lugar el pasado jueves hasta la Junta de Distrito de Villaverde, el próximo sábado organizarán una marcha que unirá las sedes de las dos administraciones con competencias en la apertura del crematorio. Con el lema “basta de contaminar los barrios del sur”, la marcha se iniciará a las 18:00 en la Puerta del Sol, frente al Gobierno autonómico, y finalizará ante el Consistorio, en la plaza de La Cibeles.
La construcción del crematorio de la M40 en San Fermín puede ser la gota que colma el vaso de la paciencia de los vecinos y vecinas del sur de la ciudad y especialmente de los de ese barrio, que desde hace años padecen, entre otros males, los efectos de los olores, ruidos y plagas de insectos de la depuradora de la China y de los grandes eventos de la Caja Mágica, que se traducen en problemas de aparcamiento, atascos, contaminación acústica y atmosférica, además de las afecciones de otras instalaciones como el Estanque de Tormentas, la Subestación de Gas o la Plataforma Logística de Villaverde. El plan de Parcesa no solo pone en peligro la salud de la vecindad de San Fermín y El Espinillo y otros barrios próximos, sino que supone un claro ataque a las políticas de reequilibro territorial que desde hace décadas reivindica el movimiento vecinal de la ciudad.
Recordemos que la batalla contra el crematorio de Parcesa se inició hace ya nueve largos años y que el movimiento vecinal ha conseguido paralizar el proyecto en tres ocasiones. Y lo hará una cuarta vez y todas las que sean necesarias. La salud de la población y el respeto al medio ambiente están muy por encima del negocio empresarial y el lucro de unos pocos.