El Ayuntamiento de Madrid inauguró el pasado 30 de mayo la nueva línea de Bus Rapid que une los barrios hortalinos de Valdebebas y Sanchinarro con su hospital de referencia Lamentablemente, pese a las advertencias de la asociación vecinal de este último lugar, desde entonces “los problemas de atascos se repiten a diario, los cuellos de botella también, tenemos problemas con los rebajes de aceras, el arreglo de parterres y la reposición de árboles sigue pendiente, la contaminación sube, las obras persisten, no han cesado, incluso tenemos noticias de que se han producido diferentes accidentes”, asegura la entidad vecinal, que también se queja de que “los tiempos en su recorrido no se cumplen”.
Por otro lado, “se nos prometió una reunión con el Sr. Alcalde Martínez Almeida y nos la han denegado”. Por todo ello, el colectivo vecinal organizará mañana una nueva protesta bajo el lema “Mejoremos Sanchinarro”. En su transcurso, además de leer un comunicado, la entidad continuará su recogida de firmas en papel, que se unirán a los casi 2.000 apoyos recabados en el portal Change.org
El vecindario teme que el Bus Rapid, que ha supuesto la reducción de carriles de circulación y plazas de aparcamiento, incremente los habituales atascos en el barrio, y por consiguiente los niveles de contaminación atmosférica y acústica.
Con el apoyo de la FRAVM, que ha facilitado contactos y reuniones con responsables del Consistorio para tratar de que modificasen ciertos aspectos del proyecto, el colectivo barrial continúa su batalla para que “la consolidación de la línea se haga de la mejor forma para sus vecinos y vecinas”.