En una suerte de “tour de la destrucción”, las y los delegados vecinales han mostrado a los portavoces del PSOE en la Asamblea y el Ayuntamiento de Madrid, Juan Lobato y Reyes Maroto, y a Luena, que es vicepresidente de la Comisión de Medio Ambiente, Salud Pública y Seguridad Alimentaria del Parlamento Europeo, el daño irreparable que la Comunidad de Madrid ha provocado en los últimos días en la arboleda de la zona verde. Lamentablemente, por motivos de agenda de última hora, la vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico de España, Teresa Ribera, no pudo asistir a la visita, tal y como estaba previsto.
El presidente de la FRAVM, Quique Villalobos, y su responsable de Urbanismo, Vicente Pérez Quintana, han acompañado a las y los representantes de las asociaciones vecinales de Comillas (Carabanchel), Arganzuela y Retiro, las tres zonas afectadas por las talas de la ampliación de la línea, en el encuentro con los políticos. Las y los portavoces vecinales han expresado su rabia por la salvaje actuación del ejecutivo de Isabel Díaz Ayuso, que con la anuencia del Ayuntamiento de Madrid, ha arrasado en estos días los parques de Comillas y Arganzuela y ayer y esta mañana buena parte del arbolado del Paseo de Delicias.
Además, tras agradecer su apoyo, han solicitado a los responsables políticos la aprobación de medidas eficaces de protección de los árboles y las zonas verdes ante la actual crisis climática. Después de las talas de estas jornadas, es evidente que las actuales leyes resultan insuficientes para proteger nuestro preciado patrimonio verde. Los dirigentes del PSOE han podido conocer de primera mano el avance de las obras y su destrozo en el parque de Arganzuela, algo que se podía haber evitado si, como defiende la vecindad, la Comunidad de Madrid hubiese ejecutado el proyecto inicial de la ampliación de la línea, que establece la apertura de la estación de Madrid Río en el Paseo de Yeserías, no en plena arboleda, como hace el proyecto actual. César Luena, además, se ha desplazado posteriormente al parque de Comillas, donde ha mantenido un encuentro con representantes de la asociación vecinal del barrio y de la Asociación de Familias del Alumnado del Colegio Perú, un centro directamente afectado por los trabajos de expansión del suburbano.
Durante el encuentro, las y los representantes vecinales han recordado la denuncia que actualmente mantienen en el Mecanismo de Reclamaciones del Banco Europeo de Inversiones (BEI), entidad que ha financiado con unos 372 millones de euros el proyecto de ampliación de la línea 11 de Metro.