El trazado de la calle Nuestra Señora de Valverde, en Fuencarral-El Pardo, responde a las características de un pueblo de principios del siglo XIX, donde los carros y las personas transitaban por el mismo espacio, sin diferenciar por donde circulaban unos y otros.
Esta calle fue una de las entradas a Madrid, después se convirtió en la carretera de Francia y ahora es una vía de acceso a las diferentes zonas industriales que existen camino de Alcobendas y a los nuevos desarrollos urbanísticos. Pero también es un eje central de la vida comercial y social de lo que algunos siguen llamando Pueblo de Fuencarral.
La falta de planificación y las oportunidades perdidas al elaborar los diferentes planes de Ordenación Urbana de Madrid han permitido, desde hace muchos años, que Nuestra Señora de Valverde sea una calle, en muchos tramos, intransitable para las personas, un peligro para la seguridad vial y para el medio ambiente.
El tráfico ha crecido pero la calle sigue teniendo las mismas dimensiones, sin aceras en algunas partes y con aceras de 30 centímetros en otras, lo que supone un riesgo permanente para el peatón y la imposibilidad de la circulación de carritos de bebés, sillas de ruedas, andadores, carritos de la compra e incluso del tránsito de dos personas juntas a la misma altura. Hay tramos en los que esto es imposible, sin contar el peligro para los más pequeños.
Los vecinos y vecinas, hartos de esta situación, se reunieron el pasado 14 de marzo en una asamblea impulsada por las asociaciones vecinales Tres Olivos, La UR del Poblado Dirigido, Valverde y La Unión de Fuencarral, las cuatro del barrio de Valverde. En el encuentro acordaron impulsar una recogida de firmas y otras acciones de sensibilización. El 8 de mayo presentaron 1.760 firmas en el pleno de la Junta Municipal de Fuencarral-El Pardo, que ese día aprobó por unanimidad una proposición de las asociaciones vecinales por la remodelación de la calle.
Después de este paso, han convocado para el próximo martes, 11 de junio, un paseo reivindicativo por ambos márgenes de la calle de Nuestra Señora de Valverde con el fin de mostrar las dificultades y riesgos que corre la ciudadanía que habitualmente usa la vía. “Este paseo quiere demostrar como es imposible circular por dicha calle en determinados tramos”, aseguran las cuatro entidades impulsoras de la marcha, que comenzará a las 19:00 en la plaza de Islas Jarvi y finalizará en el colegio Vasco Núñez de Balboa.
Con el paseo reivindicativo, las asociaciones vecinales reclamarán, de nuevo, la elaboración de “un proyecto integral, que tenga en cuenta el entorno urbano y permita reducir el tráfico de coches, aumentar el espacio peatonal, fomentar los modos de transporte sostenible, suprimir las barreras en el espacio público y garantizar la seguridad vial”.
